Escrito por: Verónica Spross
Guatemala, 03 de septiembre del 2020
Hace algunos años conocimos la historia de Jimmy Lai, un gran emprendedor nacido en la República Popular China, cuyo sistema comunista lo llevó a migrar y radicarse en Hong Kong, donde llegó a tener compañías importantes en el comercio de vestuario y en el sector de los medios de comunicación. El Instituto Acton lo incluyó en una serie que destacaba las cualidades de los emprendedores, llegando a destacar que el empresario realiza su labor como parte de un llamado a servir a los demás. Ahora Jimmy Lai está sufriendo persecución por su defensa del orden social libre y de la libertad de prensa, la cual ha defendido desde hace varias décadas.
En el último año Hong Kong ha comenzado a sufrir mayores presiones del Gobierno chino para integrarse plenamente al sistema comunista. La premisa de “Una nación, dos sistemas”, que se estableció en 1997 cuando se realizó la transición del dominio británico sobre Hong Kong el cual pasó a la China. Dos décadas después se comienzan a dar acciones controversiales como la ley de seguridad nacional, que viola la Ley Fundamental de Hong Kong y coharta las libertades de las cuales han disfrutado los habitantes de la pujante ciudad comercial y financiera.
En 1950 el ingreso per cápita en Hong Kong era similar al promedio mundial en ese momento que era levemente superior a los 2 mil dólares (en dólares de 2010). En 2018 el ingreso per cápita era cercano a los 40 mil dólares, el cual era cuatro veces el promedio mundial. Esto ejemplifica el gran avance de Hong Kong en un período de 70 años, a diferencia de algunos países latinoamericanos, Guatemala entre ellos, donde el ingreso por habitante no ha crecido de esa forma tan vertiginosa. No es casualidad que Hong Kong haya tenido la mayor tasa de formación de empresas en el mundo, en comparación con otros países. Ante las medidas contrarias al mercado libre que están tomando, seguramente ya no se verá ese indicador en cuanto a la formación de empresas.
Volviendo al caso de Jimmy Lai, fundador del diario ‘Apple Day’, está sindicado de intimidar a un reportero. Según sea la sentencia, podría llegar a enfrentar una condena que implicaría entre 2 a 5 años de cárcel. El acoso legal que el empresario enfrenta busca desincentivar a otros dueños de medios y a periodistas a ejercer su derecho a la libre expresión. El 10 de agosto Lai fue arrestado junto con sus dos hijos y cuatro ejecutivos de su empresa. También ha sufrido este empresario el congelamiento de sus cuentas bancarias, tanto personales como empresariales. Su fé católica sostiene y da esperanza a Jimmy y Teresa, su esposa, sostenidos por la oración de miles de personas que ruegan por su libertad y respeto a la vida.
Es preocupante la evolución del Gobierno de Hong Kong hacia la forma de operar de los estados totalitarios. En una sociedad moderna y respetuosa del Estado de Derecho, Jimmy Lai no sería perseguido por sus ideas ni por promover la libertad de expresión y de prensa. Aunque él migró hace muchos años de una sociedad restrictiva a una más abierta como era Hong Kong, hoy se están perdiendo las características que tuvo en cuanto a libertad comercial, prosperidad y respeto a la iniciativa empresarial. Ojalá las autoridades recapaciten sobre los fundamentos de la riqueza y retomen su camino como una sociedad libre y respetuosa de los derechos humanos fundamentales.